Extintores en centros educativos
La normativa que establece medidas de Protección Contra Incendios en centros escolares ha estado en vigencia durante un largo período, aunque ha sido influenciada por actualizaciones en otras normas. Desde hace aproximadamente 25 años, se han emitido órdenes específicas en este ámbito para garantizar la seguridad tanto de los alumnos como del personal en los centros escolares, instalando todo tipo de protección contra incendios como BIEs, extintores portátiles, extintores automáticos, armarios extintores, detección de humos, etc…..
En particular, la Orden de 13 de noviembre de 1984, sobre evacuación de centros docentes de Educación General Básica, Bachillerato y Formación Profesional, fue emitida en 1984.
La Orden emitida en 1984 tenía como objetivo introducir la realización de simulacros periódicos de evacuación de emergencia en los centros escolares de educación general básica, bachillerato y formación profesional.
Sin embargo, no hubo cambios en la normativa hasta el año 2007. El 24 de marzo de 2007, se publicó en el Boletín Oficial del Estado el Real Decreto 393/2007, del 23 de marzo, que aprobaba la Norma Básica de Autoprotección para centros, establecimientos y dependencias dedicados a actividades que pudieran dar lugar a situaciones de emergencia.
Medidas de prevención de incendios en escuelas y colegios
Es esencial contar con el asesoramiento de una empresa homologada debido a la amplia variedad de medidas básicas de seguridad contra incendios que deben implementarse. Además, es importante que el plan de seguridad y evacuación sea creado por personal cualificado para garantizar que pueda ser aplicado en caso de emergencia sin contratiempos. También es imprescindible llevar a cabo ejercicios y simulacros periódicos para poner a prueba estos procedimientos.
Puntos destacados en la Protección Contra Incendios (PCI) en colegios
Si la superficie construida del centro supera los 2.000 metros cuadrados, es necesario contar con una red de Bocas de Incendios Equipadas (BIEs) para la protección contra incendios. La red de tuberías de alimentación debe ser de acero galvanizado y completamente independiente. La señalización correcta de los elementos contra incendios es importante. En lugares como cocinas, laboratorios y talleres, es necesario contar con instalaciones adecuadas para la extracción de humo, como campanas, conductos y filtros.
Está prohibido el uso de sistemas de calefacción no autorizados y se deben controlar y/o eliminar posibles focos de ignición. Los elementos combustibles deben ser reemplazados y se debe contar con alumbrado de emergencia en los centros escolares que superen las 300 personas. Además, se deben instalar y mantener elementos pasivos contra incendios, como protección de estructuras, sellado de juntas y barreras cortafuego. También se deben tener sistemas de comunicación de alarma.
Programas de autoprotección en colegios y establecimientos educativos
Los siguientes aspectos son fundamentales para la inclusión en un plan integral de autoprotección, el cual tiene como objetivo proteger tanto a las personas como a los bienes de los centros educativos:
Identificación de posibles iniciadores de fuego.
Evaluación y optimización de las instalaciones de protección contra incendios.
Análisis de los elementos constructivos y materiales del edificio.
Elaboración de un plan de evacuación del centro y organización del personal.
¿Qué clase de extintores son requeridos en un colegio?
La protección y seguridad de personas y bienes en la prevención de incendios son aspectos cruciales, y los extintores juegan un papel esencial en este sentido. En especial en lugares como los centros escolares, donde suele haber una gran afluencia de personas durante muchas horas al día.
Los extintores más apropiados para los colegios son los de polvo ABC, ya que son más versátiles y eficaces en una variedad de situaciones. Sin embargo, en lugares con numerosas instalaciones eléctricas, como en las cocinas, los extintores co2 son más adecuados para su uso.
Los extintores ABC
Los extintores de Polvo ABC, también conocidos como «extintores de polvo seco», son los más recomendados para su uso en centros escolares, ya que cuentan con una carga extintora versátil y capaz de combatir distintos tipos de incendios.
El funcionamiento de estos extintores se basa en interrumpir la cadena de fuego, es decir, evitar la combinación de los tres elementos necesarios para que se produzca una combustión: combustible, calor y oxígeno. La sustancia expulsada por el extintor se adhiere a los elementos en llamas, impidiendo así su contacto con el oxígeno y deteniendo la combustión.
Este tipo de extintores, conocidos como extintores de polvo ABC o de polvo seco, son altamente recomendados para centros educativos debido a su capacidad de extinguir fuegos de clase A, B y C, es decir, aquellos originados por sólidos, líquidos, gases y compuestos combustibles.
Aunque el polvo ABC no es tóxico, es importante tener en cuenta que en grandes cantidades y lugares cerrados puede afectar la salud. Por ello, es fundamental contar con asesoramiento profesional en su uso y almacenamiento adecuado.
Como empresa especializada en protección contra incendios en Sevilla, ofrecemos servicios de instalación y mantenimiento de miles de dispositivos en toda la Comunidad de Andalucía y a nivel nacional, lo que nos convierte en expertos en la protección de edificios y grandes superficies.